Durante mucho tiempo de mi vida pensé que tenía que elegir una sola opción para todo. Ese era el mandato externo:

Una pareja.

Un propósito de vida.

Un sitio para vivir.

Un trabajo.

Y ya está: tu vida ya tiene que ser así.

Esta idea me ahogaba. Estaba en pareja y me ahogaba. Sufría muchísimo en mi trabajo pero no me planteaba dejarlo.

Hasta que descubrí el concepto multipotencial.

No somos solo una cosa. Somos muchas y muchas veces, todas a la vez.

Aquí te lo cuento:

Si estás en un momento de bloqueo y necesitas claridad para avanzar, por aquí.

Si tienes claridad y quieres conocer a otras personas que se relacionen como tú, por aquí.

Si lo que quieres es relacionarte con esas personas desde otro lugar, más auténtico, más tú y comprendiendo qué heridas se te despiertan y cómo gestionarlo, por aquí.