Si el poliamor fuera la norma
7 junio, 2022

Quienes nos relacionamos de forma no-monógama hemos escuchado ya de todo. «Que si nadie nos va a querer en serio», «que si eso son los cuernos de toda la vida», «que si no sabemos comprometernos», «que si lo que nos pasa es que nunca hemos estado enamorados de verdad»… Aunque es verdad que vivimos en el contexto que vivimos, no deja de sorprenderme lo rápido que la gente afirma cosas así sin saber absolutamente nada sobre estos modelos relacionales.

El tema de los prejuicios es algo daría para una buena revisión personal de creencias limitantes. Por ejemplo, os podría decir que elaborar la parte escrita de la viñeta que aparece arriba me ha llevado 5h pero no es verdad 🙃 Yo creo que me salió en 1 minuto. Así de fácil es sacar prejuicios, lo difícil es cuestionarlos.

Pero la realidad es que convivimos a diario con prejuicios y críticas, por lo que a menudo me preguntan ¿cómo podemos defendernos de esto? Y sé que no es fácil. Al fin y al cabo estamos viviendo un modelo relacional que ni siquiera existe en el imaginario de muchas personas y del cual no tenemos apenas referentes, por lo que a menudo nos sentimos vulnerables y sin mucha voz para encararnos a comentarios así.

Pero hay dos planteamientos que a mí me funcionan muy bien:

1. Toma distancia de la reacción emocional de las demás personas

Generalmente la gente habla sin saber y en muchos casos, si se estresan o se ofenden cuando hablas de no-monogamia, es que algo les remueve mucho a nivel personal, aunque ni estas personas lo sepan. Escucha su miedo, su cabreo como algo ajeno a tí. Al final, lo más probable es que tú seas un estímulo que está tocando alguna fibra sensible a esta persona al plantear algo tan poco común que posiblemente nunca se hayan planteado. Porque si a esa persona el poliamor ni le va ni le viene, el debate será tranquilo o ni siquiera habrá debate, pero no habrá necesidad de atacar a nadie.

2. Cuestionar mi propia reacción a la defensiva

Darme cuenta de hasta qué punto me duelen este tipo de comentarios. Porque si me duelen es que hay una parte de mi que se siente atacada y que necesita defenderse. En mi caso, antes cuando me decían «es que nunca te conformas con nada» me dolía mucho porque hasta yo misma dudaba de mi capacidad de mantenerme fija en algo. Lo llevaba con una cruz y con verguenza pero a la vez me defendía diciendo que eso no era cierto. Me trajo mucha más paz el día que asumí que eso era en parte verdad pero que también era en parte mentira. Pude responder «pues tienes razón, en general me gusta probar cosas y me gusta la aventura, gracias por preocuparte porque al final es algo que me he planteado muchas veces, aunque también veo la parte de mí más estable que cuida lo importante en mi vida». Al aceptar que eso que me decían podía ser verdad y aceptarlo, dejó de molestarme lo que la gente me decía.

Y en tu caso ¿cómo lidias con los prejuicios y las críticas externas? Si tienes algún tip compártelo en los comentarios para que podamos ayudarnos 🙂 Me encantará leeros! Y por supuesto si te relacionas de forma monógama, también cuéntanos qué comentarios recibes y cómo lo gestionas emocionalmente, que sé de buena mano que a veces desde la no-monogamia también juzgamos la monogamia con ganas… qué le vamos a hacer, los prejuicios los tenemos tod@s. Pero creo firmemente que no hay modelos relacionales óptimos, así que mejor construir según nos dicta nuestro corazón, ¿no os parece? ❤️

Os comparto un vídeo sobre el tema de «Salir del armario como no-monógam@» que os dejo aquí mismo:

https://youtu.be/K8fDhW3QMRQ

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